Por: Eduardo Medina
Foto: El Tiempo
La Gulupa, también conocida como Maracuyá Morado, está conquistando Europa como la segunda fruta más exportada desde Colombia hacia el Viejo Continente. Según cifras del DANE, analizadas por Procolombia, durante el año pasado Colombia exportó 15.259 toneladas de esa fruta, representadas por un valor de US$48.675.225.
La versatilidad de la Gulupa la hace ideal tanto para el consumo directo como para la producción de jugos, postres y otros productos. Su crecimiento como producto de exportación está transformando la economía agrícola de Colombia y promoviendo un mayor reconocimiento a nivel internacional.
La gulupa, un tesoro tropical 100% destinado a la exportación, se alza como una oportunidad de oro para los productores agrícolas colombianos que buscan conquistar mercados internacionales. Sin embargo, este cultivo no es para los débiles de corazón, ya que su éxito está rodeado de desafíos fitosanitarios que pueden hacer o deshacer un ciclo de cultivo en un abrir y cerrar de ojos.
Agrojar, a través de su empresa Jardín Exotics, se ha consolidado como el segundo exportador y comercializador de gulupa en el país, con envíos que superan las 1,700 toneladas. Su próximo desafío es conquistar el codiciado mercado estadounidense.
La gulupa, un cultivo con potencial excepcional
El éxito de la gulupa radica en la implementación de estrategias de manejo adecuadas para combatir los desafíos fitosanitarios. Quienes se aventuran en este emocionante cultivo encuentran la posibilidad de obtener beneficios sustanciales.
La gulupa colombiana se encuentra en plena expansión, y de los 15 principales destinos a los que se exporta, nueve destacan por concentrar el mayor volumen de esta fruta. Estos destinos incluyen a los Países Bajos, Bélgica, Canadá, Alemania, Italia, Kuwait, Francia, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita.
La gulupa, una joya exótica de los trópicos, tiene raíces que se extienden desde el sur de Brasil hasta México, abarcando regiones en Argentina y Paraguay. Originaria de estas tierras, esta fruta ha cautivado al mundo con su sabor único y sus múltiples usos que van desde beneficios para la salud hasta el cuidado personal y la ornamentación.
En Colombia, la gulupa se desarrolló de forma silvestre en la región amazónica, agregando un toque de misterio y encanto a su historia. Lo que la hace aún más intrigante es su versatilidad en cuanto a apariencia: esta fruta puede presentarse en tonos de verde, morado o amarillo, según su nivel de maduración.
Fuente: tomado de https://redagricola.com/, https://forbes.co/2023